martes, 29 de marzo de 2011

Deseo de Dios

“Hay una fuerte corriente de pensamiento laicista que quiere apartar a Dios de la vida de las personas y la sociedad, planteando e intentando crear un paraíso sin Él" (S.S Benedicto XVI Mensaje para la JMJ de 2011)

El joven en la actualidad tiene un profundo deseo de Dios. Se ve en cada mirada una búsqueda permanente de aquel que pueda transformar sus vidas. Los jóvenes están necesitados de Dios y eso es una gran realidad.  Drogas, alcoholismo, matrimonios separados, familias desunidas. Todo esto se puede resumir en una sola cosa: falta de amor, falta de Dios.

A simple vista se nos haría un tanto complicado ver aquel joven que busca a Dios, pues el mundo y la sociedad materializada nos muestra cada día falsos dioses a los cuales seguir e incluso adorar, pero sobre todo nos muestra "dioses" a los cuales estamos esclavizados directa o indirectamente y ejemplos podría mencionar muchos. La respuesta a esta problemática es  clara y contundente, sin Fe, sin una vida de gracia y sin oración todo esfuerzo por alcanzar a Dios es  simplemente vano.

«Perseverad en la oración» (Col 4, 2); aquella invitación que San Pablo hace siglos atrás no se ha quedado en el pasado, hoy más que nunca debe escucharse y hacer eco en nuestro interior, incluso  hoy  me atrevo a decir: ¡jóvenes perseverad en la oración! Entendiendo que debemos de construir sobre roca (Mt 7,21-2). No habrá roca más firme en nuestra vida y apostolado que Jesucristo nuestro Rey y Señor. Al cual solo podremos llegar mediante una vida basada en la oración.


El Evangelio nos recuerda «la necesidad de orar siempre sin desanimarse» (Lc 18, 1). Así mismo nos invita a rezar en todo momento: “Vivid en constante oración y súplica guiados por el Espíritu Santo” (Ef 6, 18). Viendo esta necesidad de oración no queda otra cosa mas que ponerse en la presencia del Señor y comenzar una vida nueva en su compañía.

Imitemos pues en esta cuaresma a los grades Santos valerosos que han fundamentado todo su actuar en una intensa vida oración, luchando con el rosario en una mano y una espada en la otra han vencido las tentaciones y han logrado grandes victorias, no para una nación, ni para un solo hombre, si no para Cristo nuestro Rey

¡Jóvenes…Caballeros del único Rey, encomendemos nuestra vida al Señor en una entrega total, y claro que esto exige esfuerzo, exige sacrificio, pero sobre todo exige toda nuestra  voluntad y amor. Si el camino de Cristo, como muestra de su infinito amor fue el de una muerte en la cruz, , nosotros no podemos esperar menos, reconociéndonos pecadores en todo momento, volvamos nuestro corazón al Padre  que lo puede todo.

Cuaresma tiempo de conversión y arrepentimiento, pero sobre todo tiempo de oración y continuo dialogo con Dios nuestro creador. Hermanos "No bajen la guardia de la oración, pues es fuente de vida y santidad." Reconozcamos pues la oración como centro y fundamento de todo nuestro actuar. Y esforcémonos por vivir de forma congruente con las enseñanzas de nuestro padre
  
Por ultimo me gustaría terminar con otra frase de S.S. Benedicto XVI en el mensaje para la JMJ de Madrid  2011 que resume todo lo que Cristo quiere de nosotros como jóvenes

Queridos jóvenes, la Iglesia cuenta con vosotros. Necesita vuestra fe viva, vuestra caridad creativa y el dinamismo de vuestra esperanza. Vuestra presencia renueva la Iglesia, la rejuvenece y le da un nuevo impulso"